Seguramente todos conocemos Dualshock el icónico mando de la consola PlayStation de Sony que la ha acompañado desde su primera generación hasta la cuarta. Una de sus características es su funcionamiento sin cables, algo que a día de hoy es muy común.
Sin embargo, tener un mando inalámbrico en los ochenta era algo casi de ciencia-ficción. Pero Sony, que siempre estuvo a la vanguardia del diseño (suyos son los modelos MSX más bonitos) y también de la tecnología. Fruto de ello es su modelo JS-75, un joystick sin cables para el estándar japonés. Su precio en el país del sol naciente fue de 16.500 yenes, lo que venía siendo prácticamente la mitad de lo que costaba un ordenador. Así que fue, sin duda, un accesorio poco corriente y solo al alcance de los bolsillos más pudientes de la época.
El JS-75 funcionaba con tres pilas AAA de 1.5 voltios y su receptor tenía dos cables integrados que se conectaban a los puertos de joystick del MSX. Para seleccionar el jugador 1 ó 2, cada mando tenía en uno de sus laterales un selector A/B. A pesar de ser un dispositivo adelantado a su tiempo (me imagino la cara de sorpresa de la gente al ver estos mandos conectados al MSX) para mi gusto no parecen demasiado cómodos de usar.
No obstante, queda patente una vez más lo que significó la marca Sony en el campo de la innovación del hardware y su increíble apoyo al estándar MSX durante muchos años.
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Sony era indudablemente Hi-Tech en los 80.
Totalmente de acuerdo. Sony fue en aquella epoca pura magia. Cuando veias los productos de esta casa desde un escaparate con la pegatina «It´s a Sony», sabias que era lo TOP. No solo en ordenadores MSX, todos los aparatos electrónicos de la decada de los 80 fabricados por Sony, fueron a mi modo de ver los mas bonitos sin duda. Televisores, Radiocassettes, etc.. Aparte de ser buenos artefactos mimaban mucho la estética, eran golosinas !
Cuando veías esos productos Sony simplemente ¡alucinabas!